Las claves para lograr un buen proyecto

La incidencia del color en los ambientes
16 junio, 2017
¿Cómo diferenciar una pintura de buena calidad?
23 junio, 2017
La incidencia del color en los ambientes
16 junio, 2017
¿Cómo diferenciar una pintura de buena calidad?
23 junio, 2017

Para lograr un buen proyecto lo principal es escuchar al cliente. Conocer sus necesidades, preferencias, qué es aquello que le gusta, lo que desean mejorar y la solución que ellos buscan. Todo esto influirá en nuestro trabajo a la hora de trabajar con ellos ya que nos brindará información útil para diseñar la estrategia que mejor se adapte a lo que busca.

El saber escuchar engloba mucho más: es comprender más allá de sus palabras, es decir, ser capaz de percibir sus ideas, pensamientos, actitudes y gestos. En otras palabras, entender desde el punto de vista de nuestro cliente.

Al comunicarnos con un cliente, considero esencial conocer y entender el problema a solucionar, lo que desea y sus expectativas. Por ejemplo, un buen dibujo en perspectiva entregado al cliente de como quedaría proyectada la idea ayuda a comprender la intención de diseño del ambiente o espacio terminado.

Otro punto importante es el presupuesto. Las pretensiones de diseño deben acompañar los recursos con que cuenta el cliente para poder realizar la remodelación. No todos los clientes son iguales, por lo que debemos tener en cuenta esto para brindarles la mejor solución posible acorde a sus posibilidades. Sería un gran error ofrecer algo que luego no se pueda cumplir por falta de presupuesto.

Saber escuchar y ser observador nos permite estar en sintonía con el cliente, para de esta forma poder asesorarlo en diversos aspectos:

– Mantener la idea de proyecto acomodando la materialidad acorde al presupuesto del cliente.
– Tener en cuenta que un material muy económico puede ser favorable en su costo, pero su vida útil será menor.
– Recordar que el costo mayor de una obra se refleja en el final, con las terminaciones.

La ecuación a tener en cuenta en una remodelación sería la siguiente:

«Al inicio, con el 30% del presupuesto logramos realizar el 70% de la obra. Luego con el 70% restante de los recursos, lograríamos finalizarla en su aspecto más costoso, las terminaciones (el 30% final de la obra).

Desde Renóva Soluciones Constructivas nuestro objetivo es mejorar la calidad de vida de nuestros clientes y recordarles que uno es parte de la solución y no de un nuevo problema.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *